domingo, agosto 01, 2004

Mini-retrospectiva

El recuerdo más antiguo que alberga mi mente es el de un detalle de mi primer día en el jardín de infantes. El flashback me hace tener nuevamente tres años y estar sentado en una mesa con sillitas azules. A mi lado hay un nene medio pelirrojo, con pecas. Tiene una quemadura de color marrón en la mano. Según me cuentan, ese día grité mucho y me agarraba de las rejas porque no quería quedarme ahí. Pero lo único que quedó registrado en mi memoria hasta el día de hoy era la mano quemada de Tadeo.
[detesto a las personas que se olvidan los nombres]